UN MES ANTES TE AVISA
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Infarto de miocardio: Un mes antes, tu cuerpo comienza a advertirte
Misiones - Candelaria: El tabaquismo, la presión arterial alta, la obesidad y el estrés a largo plazo son una serie de factores que aumentan el riesgo de un ataque cardíaco o un ataque al corazón. Una vida saludable y el cuidado de sí mismo pueden, por lo tanto, reducir el riesgo de un ataque cardíaco.
Los síntomas no están limitados al corazón sino que pueden propagarse por todo el cuerpo. Muchos de los síntomas se pasan por alto y se relacionan con otras causas. Sin embargo, en muchos casos tiene que ver con el corazón. El diagnóstico precoz te brindará la mejor oportunidad de un tratamiento exitoso.
Reconocer las advertencias.
Sensación de debilidad – uno de los síntomas más comunes es la sensación de que tu cuerpo se está debilitando. Tu cuerpo se siente débil porque tu corazón reconstruyó una vena. Esto significa una circulación sanguínea y un flujo de sangre menos óptimos. Tus músculos obtienen menos oxígeno lo que se traduce en debilidad muscular y el riesgo de caerse con más frecuencia.
Mareos y sudoración – esta es también la sensación de reducción de la circulación sanguínea. Cuando se bombea menos sangre a su cerebro, puedes comenzar a sentirte mareado. Tu cuerpo también puede sentirse pegajoso y sudoroso. Tu cerebro necesita suficiente sangre y oxígeno para que tu cuerpo funcione correctamente.
Presión sobre el pecho – Cuando sientas presión sobre el pecho, siempre es una buena idea que un médico te examine. Esto vale especialmente cuando perteneces a un grupo de riesgo. La presión sobre su pecho aumentará más y más en caso de un próximo ataque al corazón. La presión y el dolor también pueden irradiarse a otras partes del cuerpo, como los brazos, los hombros y la espalda.
Resfriado o gripe – Muchas personas que alguna vez tuvieron un ataque cardíaco describen síntomas similares a los de la gripe en el período anterior al ataque cardíaco.
Fatiga – ¿A menudo te sientes cansado? La fatiga también es un síntoma de que hay menos circulación en el corazón. Si tu corazón tiene un mal suministro de sangre, tiene que trabajar más para mantener su sangre bombeando. Sientes esto porque te cansas.
Falta de aliento – Otra advertencia de tu cuerpo es la falta de aliento. Cuando los vasos sanguíneos se estrechan, tus pulmones también reciben menos sangre lo que hace que no puedan hacer bien su trabajo. Tu corazón y tus pulmones trabajan en estrecha colaboración. Si uno de los dos no funciona bien, esto tiene un efecto inmediato en el otro.
Cuando reconozcas estos síntomas, te recomendamos que siempre consultes a un médico.
Fte e Img: Candelaria Online
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