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EL NEGOCIO DE LOS POCOS

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 Santa Cruz - Río Gallegos: La “Gestión Gleadell” empezó con todo en Servicios Públicos Sociedad del Estado (SPSE). De acuerdo a información documental a la que accedió OPI y News, SPSE inició una refacción en el 4º piso del edificio en calle Roca de Río Gallegos por un valor de $ 3.796.586.28 y para no llamar a licitación, dado que por más de 2 millones de pesos la empresa está obligado a hacerlo, el Presidente de la empresa desdobló el gasto en dos tramos de $ 1.898.293.14 que le otorgó al Ingeniero Santiago Alfredo Molina, un particular (CUIL 20-25026748-8) quien tiene como actividad ISIC principal en su inscripción “Venta de partes, piezas y accesorios para vehículos automotores”, como responsable Inscripto.
OC SPE 1
Una de las dos Ordenes de Compras idénticas que se emitieron a Santiago Molina
Solo para mostrar cómo se ha instrumentado esta “inversión” de Gleadell, como una de las primeras medidas que disparó “los primeros gastos” en la empresa estatal, ni bien se hizo cargo, digamos que el presidente de SPSE le otorgó alegremente a Molina la suma de $ 3.796.586,28 con fecha 25/09/20 Nota de Pedido Nº 35.521/09/20 y en cuyo detalle figura la solicitud de reforma de un baño, instalación eléctrica y pintura general en el 4º piso del edificio central de la localidad de Río Gallegos, repartido ese importe en las Órdenes de Compra Nº 142 y 143, ambas idénticas en importe y detalle, donde claramente se observa la intencionalidad de particionar la cifra para evitar el proceso licitatorio.
Nelson Dariel Gleadell de 20 años, fue nombrado en el Directorio de SPSE con la máxima categoría y su padre fue nombrado Presidente
 
Gleadell
Las investigaciones practicadas sobre la metodología que desarrollan en SPSE para hacer estos negocios en una especie de “coto de caza”, donde nada se licita y todo queda en manos de amigos, indican claramente que en SPSE (como en otros organismos del estado provincial) se particionan los montos para evadir el llamado a concurso y de esa manera direccionan las obras y los fondos a manos de quienes ellos quieren, lo que hace suponer que, además de irregularidades administrativas, subyace la sospecha de corrupción retornos, sobreprecios y negocios comunes de funcionarios y empresarios. Cuando ahondamos en las preguntas a las fuentes, nos encontramos que algunos de los trabajos que pudimos constatar, ya habían sido pactados o comenzados cuando en la presidencia estaba Michudis, es decir que metodológicamente Gleadell no inventó nada, en todo caso, le dio continuidad.
De esta manera y estudiando la documentación en nuestro poder, se puede establecer que para la refacción del 4º piso del edificio de SPSE, el que mayor cantidad de OC concentra es Roby Tanarro, quien sumaría una cifra aproximada a los 30 millones de pesos, mientras que Santiago Molina (el mencionado anteriormente) suma estos 4 millones de pesos recientes. También en el 4º piso se procedió a realizar trabajos de subdivisiones y cambios de pisos. 
Orden143
La orden de Compra Nº 143 idéntica a la anterior
En tanto, en la planta baja del edificio de SPSE, la empresa que factura es la de Lucas Kalmus, de la cual pudimos observar varios contratos parecidos a los mencionados anteriormente, en el edificio de calle Roca, todos de $ 1.899.000,00, es decir, menos de 2 millones de pesos para “que sea manejable” el procedimiento, nos indicaron las fuentes consultadas.
Una de nuestras fuentes en el Tribunal de Cuentas dijo expresamente “Esta es una modalidad muy difundida en la corrupción santacruceña, la vemos en municipios y organismos autárquicos. Se puede encontrar en varios organismos públicos. Usan esta metodología de partir las facturas para evadir reglamentaciones, pero en este caso de SPSE, además, esta modalidad tiene como motivo que los realizadores de esos trabajos Tanarro-Ivovich/ Kalmus-Kalmus y Molina-Gauna (SIC) no tienen papeles para presentarse en licitaciones públicas y entonces toman este atajo, que claro está, nadie observa ni controla”.
El origen
“Esta no es una metodología extraña a Santa Cruz, por el contrario está muy afianzada y respecto de ella han surgido “nuevas figuras” con los mismos vicios que los viejos, donde vinieron a suplantar a los anteriores en los negocios públicos pero con las mismas mañas que ya conocemos”, le dijo a OPI un abogado que cumplió tareas en la empresa de servicio eléctrico y conoce tanto a los actores como a la modalidad administrativa. 
“Uno de los impulsores de estos negocios es Franco Gauna, hijo de Carlos, ex marido de Liliana Korenfeld. Franco vino desde El Calafate donde estaba nombrado en Vialidad provincial, estuvo en el Directorio de Vialidad con Iglesias y cuando éste último se fue de Vialidad a Gauna lo mandaron al Directorio de SPSE” dijo la fuente y agregó “Gauna ya lo había contratado a Molina para hacer reparaciones/refacciones en Vialidad y recuerdo que cuando estaba junto a Iglesias, tenía en los planes hacer un edificio de Vialidad réplica del que hay en Lisandro de la Torre en Río Gallegos, en la ciudad de Caleta Olivia. Pero Molina no tiene empresa, la empresa es él mismo”.
En opinión de este profesional “Santa Cruz solo renovó nombres, pero en honestidad de gestión, “0”. Fíjense que se trata de gente joven, profesionales del medio, gente conocida, con padres que en algunos casos han sido cuestionados por su relación con los gobiernos provinciales. Sin embargo sus hijos siguen el mismo derrotero. No hay recambio moral, es solo recambio generacional”, concluyó el abogado quien aseguró que Franco Gauna es íntimo amigo de Máximo Kirchner, un aliado incondicional en la provincia de Santa Cruz y ser “del palo”, tiene sus recompensas.
Fte e Img: Opi Santa Cruz
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